Buscando a Chuck Bass

Algo me dice que si mi hija quiere quedarse no es por su propio pie. Voy a la suite de su amigo Chuck, necesito hablar con él para saber cuál es el motivo de la ilusión de mi hija por quedarse.
Llamo a la puerta esperando que alguien me conteste

Buenos días, Chuck.
Digo a la vez que entro.
Un placer volver a verte.

No, no importa, sólo he venido a hacerte una visita y a preguntarte un par de cosas...
Me quedo de pie.
Además, tengo negocios que hacer, espero que lo entiendas.
Veo cómo el chico asiente con la cabeza
Verás, no sé si sabrás, pero me gustaría que Amanda volviera a Suiza. Ella está empeñada en que no quiere irse, pero sé que alguien le está... Comiendo la cabeza, por así decirlo. Sabe la razón por la que quiere quedarse?

¿Perdón?
Pregunto.Quizás no he entendido bien... La razón... ¿Chuck Bass?
¿Qué tienes que ver en todo esto?
Digo cada vez más enfadado. No me gusta que me pasen por encima, y menos un niño

Fui yo quien le di ese consejo hace muchos años, señorito Bass. Veo que lo toma al pie de la letra.
Digo fríamente.
Pero lo que no me creo es que mi hija se haya enamorado. La conozco, ella no es capaz de querer ni a su padre.

Me doy la vuelta
Se irá a Suiza, me da igual que tenga un enamoramiento adolescente.

-Jhon...le dije no se equivoque...no voy a permitirlo...le dije

Quién eres tú para decidir en la vida de mi hija...
Un simple novio, que luego cambiará a la primera de cambio.
Parece mentira que no la conozca, señorito Bass.
Quizás esté mintiendo, pero lo único que puedo conseguir para que mi hija se vaya es que se pelee con su novio, y espero hacerlo

Eso decía yo al principio cuando se fue a Suiza. Confío en ella, tendrá cuidado con lo que hace, estudiará.. Y mírala...
Está perdida en un mundo que no necesita, y el mundo de Manhattan no es su mundo, Chuck, parece mentira que tú no lo sepas.
Suelto.
La verdad, me gustaría tener a mi hija cerca, pero ya he perdido demasiados años y una preocupación menos que tener si se va a Suiza. Además tendré las espaldas cubiertas por la prensa.
Me dirijo a la puerta.
Chuck, cuando te deje, no vengas llorando y diciendo que llevaba razón.
Saluda a tu padre de mi parte, dile que luego vendré a visitarlo
Abro la puerta y salgo de la suite de Chuck Bass. Necesito convencer a mi hija para que se vaya.