Viejos tiempos

Georgina bajó al bar del hotel y se sentó junto a la barra, divisando el lugar y viendo la 'mercancía'.
Pidió un Martini, como siempre solía hacer para empezar y le dió un breve sorbo.

Cuando vió a Chuck se le dibujó en el rostro la sonrisa más amplia que había puesto en todo el día.
- Desde que entran en tu Suite cada día, cielo - respondió cortante - ¿No quieres acompañarme a una copa?

- Suiza es muy aburrido - contestó mientras le miraba con una sonrisa de picardía - además, os echaba de menos.

Miró a Chuck y negó con la cabeza, sonriendo.
- No te los puedo contar, Chuck - contestó y volvió a coger la copa, bebiendo otro sorbo sin apartar la mirada de Chuck - pero tranquilo, no te haré daño.

Georgina estalló en una carcajada ante el comentario de Chuck.
- No seas ridículo, Charles - dijo mientras recuperaba en aire - ¿Tienes por ahi algún pitillo?

- Un pitillo no es droga, Bass - dijo sonriendo pícaramente.
Se levantó y se acercó al chico, poniendo su mano en su muslo.
- Vamos... se que tienes uno.

Puso cara de estar tremendamente ofendida, pero la cambió rápidamente por su anterior cara de picardía.
- ¿Por qué, Bass? - dijo con voz de niña pequeña caprichosa - ¿Acaso has olvidado los viejos tiempos?

Sonrió de medio lado mientras mantenía su ceja derecha arriba, como solía hacer.
- Y más si fue el primero ¿no, Chuck? - dijo y comenzó a juguetear con el pelo del chico.

Rió brevemente por el cambio de tema.
- Y volveré a salir, me he encargado expresamente de ello - dijo sonriendo maliciosamente.

- Nada... pero probablemente la relación Nate-Blair dure esto - dijo y dió un chasquido con los dedos - Ayer Nate subió a mi Suite y hay testigos, y fotos.
Le suiñó un ojo divertida y cogió el cigarro.

- Asi tendras via libre con Blair... - dejó caer mientras le daba una calada al pitillo.

Torció el gesto dulcemente y tiró el pitillo al suelo para despues pisarlo.

- Te encantará verme a mi, no mientas - dijo con descaro.